Origenes (I)

Cuando lei el comentario de Sinclair a mi anterior post me salio una de estas sonrisas acidas. En ocasiones la vida parece una pelicula de humor negro. Decia Sinclair que cada familia tiene sus cosas, pero que todos estamos seguros de que si nos diesen la posibilidad, no la cambiariamos. A lo que yo solo puedo responder con esa sonrisa ironica y preguntar si la familia viene en pack completo o si se puede cambiar cada unidad. Si es el primer caso, me quedo con lo que tengo, que a algunos de ellos les tengo cariño, y siempre me ha asustado desconocido J

Pero si es lo segundo, y puedo decidir cambiar a cada uno individualmente, no lo dudo ni por un momento. Es más, no pido nada a cambio, me contento con que algunos jamás hubieran estado en mi vida. Puede sonar duro, pero es la pura verdad. Y el primero que quitaría sería a mi padre.

Ahora debeis estar pensando que debe ser un monstruo para que yo diga esto. Pues no. Simplemente es una persona a la que nunca le hemos importado una mierda ni yo, ni mi madre, ni el resto de mis hermanos, y probablemente el resto del mundo. Y analizandolo friamente, puedo decir que no he aprendido nada importante de él. Bueno, en realidad creo que si que he aprendido ciertas cosas, aquellas que mas odio, mis partes mas negativas, mis miedos, proceden en cierta forma de él, aunque el culpable de todas mis acciones sea siempre yo.

Asi que todo lo que le debo son varios millones por haberme dado una vivienda y una comida durante 20 años. Y, la verdad, no se si compensa el "daño" que me ha causado.
En fin, no le deseo ningún mal. Para nada. Pero estoy convencido de que mi vida, y la del resto de mi familia, sería mas feliz sin él. Tal vez incluso aunque tubiesemos que arreglarnoslas con la mitad del dinero. Y es que la felicidad no la da el dinero, por mucho que ayude a conseguirla.

Os sonará exagerado, pero asi son las cosas. En su defensa he de decir que nunca me ha puesto la mano encima (bueno, en realidad un par de veces, y no lo recuerdo muy bien, pero creo que me lo merecía, ya se sabe, cosas de crios). Eso, y lo que ya he dicho, que ha trabajado toda su vida.

El problema es que no recuerdo que me halla consolado nunca. No recuerdo haberlo visto besar (o tan siquiera ser cariñoso) con mi madre nunca. No recuerdo que nunca jugase conmigo. No recuerdo que nunca me echase una mano. No recuerdo que inciase una conversación si no es para reñir o para algo que le interese a él. No recuerdo, en definitiva, que jamas se halla preocupado por mi, por lo que me pasara.

Y en cambio tengo recuerdos malos para parar un tren.

Recuerdo como, al reves de lo normal, yo no me perdía de pequeño, sino que me perdía mi padre. Las mañanas de verano tocaba ir de compras a El Corte Ingles (no esperarías que me llevase a un parque o a dar un paseo ¿no?), que eran de un divertido estremecedor. Basicamente eran un par de horas de silencio, siguiendo a mi padre de lado a lado, y sin perderlo de vista, porque como en algun momento me parase a mirar algo (por ejemplo, lo mismo que miraba él), cuando levantaba vista ya no estaba. Y a esperar a que se diese cuenta de que no estaba y volviese a buscarme. Quizas deba agradecerle el desarrollo de mi imaginiación a esas horas en silencio ;)

Recuerdo ir camianando a la Igelsia con mi madre, y el andando 20 metros mas adelante, a su propio ritmo.

Recuerdo haberme comido broncas simplemente porque el tenia un mal día. Como aquella vez que llego una abultada factura de internet, que era de mi hermano y que yo no podia usar, y esa tarde me llamo un amigo por telefono. Y claro, el que se comió los gritos fui yo. Bueno, yo y el que estubiera al otro lado del telefono.(recordemos, estamos en Freakworld, no busquen ninguna conexión logica entre ambos hechos)

Recuerdo como, cuando era una chaval, usaba siempre el primer papel que encontraba para anotar los numeros de la lotería, habitualmente alguno de mis dibujos.

Recuerdo cuando yo todavía era un niño bueno y sincero hasta el extremo, y como el no me creía sistematicamente.

Recuerdo con 15 o 16 años llegue a casa con unas malas notas, y me grito: "Tu y todos tus amigos sois una panda de imbeciles y maricones".

Recuerdo sus risas cuando le dije que le retiraba la palabra, y recuerdo como trato de arreglarlo forzandome a saludarlo (lo que da un concepto de lo que para el significa hablar).

Recuerdo cuando me dio por sacar el tema de el holocausto, y dijo algo asi como "Ya, bueno, pero los judios tambien hicieron de las suyas a los alemanes"

Recuerdo como hacía rabiar a mis dos sobrinos hasta conseguir que llorasen, sistematicamente, día tras día, en cualquier ocasión.

Recuerdo como, hace unos meses, no quiso venir a la comunion de mi sobrino, porque estaba muy mal de salud. Salvo para irse el dia anterior ( y el siguiente y demás) de compras por la mañana. Recuerdo como mi madre tubo que ir sola a la boda de mi primo por el mismo motivo, que él es un asocial al que no le gustan las personas, no ya los grupos grandes, sino las personas en general.

Recuerdo como el otro día llamó por tercera tramposos a mis tios en sus narices tras una partida de cartas, y como se ría mientras mis tios, ya cansados, se ofendían, y el casi lograba lo que quería, que mis tios dejasen de venir a casa todos los días, y quitarle una de las pocas diversiones que le quedan a mi madre. Pero claro, lo unico que importa es que a el no le gusta.

El tan solo disfruta pasandose el día tumbado en el sofa, viendo la información sobre la bolsa en el teletexto, y buscando algun motivo para protestar, ya sea algo personal o un tema politico.

Y todas esas cosas, todos esos recuerdos, y muchos otros, van conformando su persona. Ese es mi padre, un hombre egoista, asocial, irracional, carente de amor y, en cierta manera, cruel. También un hombre que ha tenido una vida dura, y que ha pasado por malos tragos. Pero eso no justifica para nada su forma de ser ni sus actos, al igual que estos no justifican los míos.